martes, 24 de julio de 2012

-

Me quedo quieta, con los ojos totalmente fijos y abiertos, comienza a oscurecer todo, como si fuera una pantalla negra ¡Por fin, comienzo a soñar despierta!... Y te veo, en diferentes momentos y situaciones de nuestra próxima historia. En un instante veo como nosotros nos entregamos al éxtasis que comparten nuestro cuerpos en tu cama. Luego todo se vuelve difuso y de inmediato veo como te hago sufrir con mis ironías y mentiras, parece como si estuviera jugando con las palabras y me encanta confundirte para que ni sepas donde te encuentras, me causa gracia. Sí es gracioso, ahora no te hablo ni tú me hablas, parece fácil porque ninguno de los dos hace el esfuerzo y el orgullo crece cada vez más, pero al mismo tiempo es como si muriera de miedo por algo, por no tenerte o quizá por tenerte. Te veo como mi amor platónico desde pequeña, al cual conoceré en unos minutos y mi vida e historia cambiarán para siempre, por el solo hecho de que podré verte y sentirte, ¿te querré conocer en realidad? ¿o es sólo lo que imagino de ti, lo que hace que me encantaría conocerte?. Nuevamente esta pantalla se vuelve negra y nítida, te veo a ti y ami, pidiendo perdón, el uno al otro, rogándonos, besándonos los pies, para volver hacer los mismos de antes, para volver a sentirnos como en realidad éramos cuando nos presentaron, arrepintiéndonos de esta prematura y difusa historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario